2. Cuadriláteros

Cuadriláteros

 

Dada la correspondencia entre los triángulos rectángulos e isósceles con los paralelogramos cuadrado, rectángulo y rombo; y los trapecios: rectángulo e isósceles, estos no serán objeto de nuestro estudio en este apartado.
Así pues, solamente analizaremos aquellos cuadriláteros que se puedan descomponer en dos triángulos escalenos no rectángulos: el romboide y el trapecio isósceles

Ya sabemos que los datos mínimos que debemos conocer para trazar un romboide son tres, mientras que para un trapecio escaleno serán cuatro.

En la resolución de los ejercicios emplearemos dos métodos:

  1. Triangulación, esto es, las relaciones métricas entre un triángulo escaleno y los dos cuadriláteros, también analizaremos las relaciones que se pueden establecer entre un romboide y un trapecio escaleno.
  2. Semejanza: la forma del cuadrilátero se conoce; pero no sus magnitudes, aunque se pueda establecer alguna proporción. El centro de semejanza pueden ser un vértice del polígono o un punto interior.