2.1 La filosofía hegeliana

 Hegel, fenomenología del espíritu
 Fenomenología del espíritu
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La filosofía idealista de Hegel partía de la Idea como el sujeto o el elemento originario. Éste se aliena o se materializa en el mundo natural y vuelve a sí, o se reconcilia consigo mismo, a través de la autoconciencia de la humanidad. Marx rechaza una concepción racional de la realidad como ésta en la que, en última instancia, toda forma de realidad es una expresión del Espíritu o la Idea. Como veremos en los capítulos dedicados al estudio del materialismo histórico, Marx invertirá las relaciones establecidas por Hegel entre la conciencia y la realidad material, o lo que es lo mismo, entre el ser y el pensar.

El carácter ideal o racional de lo real y la exposición hegeliana de un sistema de desenvolvimiento de la idea en el que aparecen como momentos de la misma el Derecho, el Estado, etc, conducía a la justificación del orden político y social de la sociedad de su época, comprendido éste como la realización de la idea.

Otra consecuencia del idealismo hegeliano es una interpretación puramente abstracta de la naturaleza humana, concebida como razón o espíritu; Marx no admitirá una visión de la naturaleza humana en general, ahistórica, al margen de las condiciones reales de existencia de los seres de una época.

Por otro lado, Marx también critica el carácter teórico y especulativo de un modelo, el hegeliano, que considera a la filosofía como mera teoría o reflexión de la realidad; para él, la filosofía entendida así se manifiesta como ideología, como justificación teórica del orden existente. En contraste con ello, defiende una visión del saber circunscrito a la realidad histórica y entendido en su función práctica, esto es, como praxis.

En todo caso, Marx reconoce la importancia del modelo hegeliano y el valor de la dialéctica como método de expresión de la realidad, método que él mismo aplicará, pero desde un planteamiento materialista.
La influencia de Hegel dio lugar a dos corrientes de pensamiento conocidas respectivamente como la derecha y la izquierda hegeliana.

La derecha lleva a cabo una interpretación conservadora del sistema hegeliano; sus partidarios defienden la tradición cristiana y dan apoyo teórico a la legitimación del régimen prusiano. Por el contrario, la izquierda, hace hincapié en el método dialéctico empleado por Hegel, resaltando el carácter procesual de la realidad, son críticos con la religión y defienden posiciones materialistas.

Marx participa inicialmente de las ideas de la izquierda hegeliana, aunque también acaba siendo blanco de sus críticas en la medida en que Marx desarrolla su pensamiento. Dentro de esta corriente destaca el tratamiento dado por Marx a la filosofía de Feuerbach.
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Feuerbach
Ludwig Feuerbach
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Un referente fundamental para Marx dentro de la izquierda hegeliana fue Feuerbach, autor que protagoniza una crítica materialista al pensamiento hegeliano y por el que Marx muestra interés en su juventud, un interés plasmado en su obra Tesis sobre Feuerbach. Tras el entusiasmo inicial por su obra, las limitaciones que cree observar en su análisis serán un incentivo para la profundización en la crítica del idealismo hegeliano y su concepto de alienación, la valoración de la dialéctica y la interpretación histórica del materialismo.

frente a Hegel, Feuerbach defiende una visión materialista de la realidad: no es el pensamiento el punto de partida de la realidad, sino a la inversa, la realidad material y sensible el fundamento del pensamiento. En su obra La esencia del cristianismo Feuerbach lleva a cabo una interpretación de la religión comprendida como alienación o enajenación: el ser humano se aliena en la religión, ya que proyecta en Dios, un ser extraño constituido por su imaginación, sus propios atributos y sus ideales de perfección. En un mundo lleno de necesidad, la figura divina representa la ausencia de limitaciones; el ser humano queda postrado ante un dios al que venera y al cual atribuye sus más elevadas cualidades, reservándose para él la condición más baja y miserable.

Para Feuerbach la esencia de la teología no es sino la misma esencia del hombre proyectada fuera de él; la emancipación o superación de la alienación vendrá dada por el reconocimiento de la religión como el resultado de la propia conciencia humana.

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  • El socialismo representado por autores como Saint Simon y arranca de los problemas planteados por la revolución industrial y se propone la creación de comunidades constituidas de acuerdo con ideales sociales. Frente a él, Marx defenderá un socialismo .
  • De sus estudios de la economía inglesa, representada por autores como Adam o David , Marx extrae herramientas técnicas para el análisis del sistema económico.
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