2. Reproducción sexual



Imagen de animación en Flickr de The Journal of Cell Biology (1) y Proyecto Biosfera de ITE, bajo licencia CC (1) (2)

Animación perteneciente a aplicación web "Genética humana"; autor: Manuel Merlo Fernández

La reproducción sexual es la más habitual en los animales. Su finalidad es originar seres genéticamente distintos a los progenitores.

Se caracteriza porque participan dos individuos que utilizan células haploides especializadas, llamadas gametos. En la reproducción sexual son necesarios dos gametos diferentes, los masculinos se denominan espermatozoides y los gametos femeninos, óvulos.

Estas células se producen en órganos especializados, llamados gónadas. Los testículos son las gónadas masculinas que producen espermatozoides y los ovarios son las gónadas femeninas que producen óvulos.

La formación de gametos se origina por un mecanismo denominado gametogénesis. Los gametos de distinto sexo se unen en un proceso denominado fecundación que origina una célula denominada cigoto que comienza a desarrollarse para formar un nuevo individuo mediante un proceso conocido como desarrollo embrionario. Este proceso origina individuos que necesitarán de un proceso de desarrollo postembrionario para alcanzar la madurez sexual.


Imagen de fondo en Flickr de Alba Sud Fotografía bajo licencia CC(BY-NC-ND). Imagen de Tenia en Wikipedia de Roberto J. Galindo bajo licencia CC (BY-SA)

 

La mayoría de animales son dioicos o unisexuales, es decir, cada individuo solo puede producir un tipo de gameto; el que produce espermatozoides es macho y el que produce óvulos, hembra. En estos animales suele ser frecuente la existencia de diferencias morfológicas externas (color, tamaño, etc.) entre ambos sexos (dimorfismo sexual).

 



Imágenes en Wikipedia de Chris (hembra izquierda, macho derecha) y Flick de Carmen Fuentes,
bajo licencia CC (1) (2)



Hay otros animales que producen gametos de las dos clases normalmente en órganos diferentes. Son los organismos hermafroditas o monoicos. Algunos como los caracoles sólo poseen una gónada que fabrica los dos tipos de gametos. A este tipo de gónada se llama ovotestis. Los organismos hermafroditas se comportan de forma sucesiva como machos o como hembra. La razón está en que las gónadas masculinas y femeninas maduran en periodos de tiempo diferente para evitar la autofecundación. Sólo algunos organismos hermafroditas parásitos, como la tenia, son capaces de autofecundarse.