4. La ley que mueve el mundo
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Seguro que con esto de la crisis, más de una vez has oído que gran parte de culpa lo tiene el exceso de ofertas de viviendas que hay frente a la escasa demanda. En el diario El País, el 30 de Junio de 2009, aparecía publicada la siguiente noticia:
"Aunque muchas promotoras se resisten a aplicar grandes rebajas a sus pisos, los expertos creen que los precios tienen que bajar muchos más, pues la oferta no para de crecer y la demanda está estancada a la espera de tiempos mejores. Así, algunos profesionales aseguran que los precios seguirán a la baja aunque no se sabe hasta cuándo y hasta dónde"
En la notaría de Patricia no paran de tasar pisos y viviendas de segunda mano.
El funcionamiento de las economías capitalistas se basan en un conjunto de mercados donde se compran y se venden los bienes y los servicios, así como factores productivos (tierra, trabajo o capital).
El aspecto esencial de un mercado es que los compradores y vendedores de un bien o servicio entran en contacto libremente para comercializarlo. Por tanto, todo bien o servicio está sometido a la oferta y a la demanda.
11. Imagen de de Paula FJ bajo licencia Creative Commons |
La función de demanda del mercado muestra la relación entre la cantidad demandada de un bien por todos los individuos y su precio, manteniendo constante otros factores (renta, gustos, precios de bienes relacionados,...).
Así, esta función que representaremos, fd(p), nos da el número de unidades de un producto, en función del precio, p, de cada unidad, que la gente está dispuesta a adquirir.
Como función que es, su expresión matemática más simple será la que venga dada por una función afín. O sea, que la función de demanda puede venir dada de la forma:
fd(p) = m·p + b; con m <0
Está claro que la pendiente de la recta, m, debe ser negativa, pues la función debe ser decreciente. Mientras mayor sea el precio de un bien, menos cantidades está la gente dispuesta a comprar.
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La función de oferta del mercado muestra la relación entre la cantidad ofrecida de un bien por todos los productos y su precio, manteniendo constante otros factores (tecnología, precio de factores productivos,...).
Así, esta función que representaremos por fo(p), nos da el número de unidades que los fabricantes están dispuestos a producir u ofertar en función del precio unitario del producto.
Al igual que la función de demanda, la expresión más simple de esta función de oferta será una función afín, cuya expresión será de la forma:
fo(p) = m·p + b; con m>0
En esta función la pendiente debe ser positiva, pues mientras más caro sea el precio del producto, más está dispuesto el productor a ofertar.
La ley de la oferta y la demanda por los suelos.
Pero..., ¿habrá que ponerse de acuerdo?, ¿no?
De nada sirve que un productor oferte mucho si después no hay quien lo adquiera ni al revés, así que, habrá que encontrar un punto en el que oferta y demanda se pongan de acuerdo; un precio en el que oferta y demanda vayan en consonancia.
Cuando se ponen en contacto consumidores y productores con sus respectivas funciones de demanda y oferta, podemos ver cómo como se lleva a cabo la coordinación de estas dos funciones. Simplemente hemos de ver conjuntamente las dos funciones y ver lo que ocurre.
En el siguiente gráfico se ve lo que ocurre cuando simultáneamente se ponen ambas funciones:
El punto donde se cortan las dos funciones se llama punto de
equilibrio y refleja el precio que debe tener el producto para que la
cantidad ofertada y la cantidad demandada sean iguales.
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Las funciones de oferta y demanda correspondientes a la producción de tinajas de un taller de alfarería son:
fo(p) = 3p + 150 y fd(p) = 300 - 2p, donde "p" es el precio en euros. ¿Qué precio debe poner el alfarero para que oferta y demanda coincidan?
Pero como este hombre no tiene ni idea de matemáticas, decide poner un precio de 40 € la unidad. ¿Qué le ocurre?
La economía de un gran almacén de zapatos se rige por las siguientes funciones de oferta y demanda:
fo(p) = 0,38p + 0,6 y fd(p) = -0,62p + 30; donde p se expresa en euros y fo(p) y fd(p) en miles de productos.
Si el precio por unidad es 40 euros, el almacén estará dispuesto a producir
zapatos y la demanda será de unidades.El precio de equilibrio es
€ y la cantidad de equilibrio será por tanto de zapatos.
Las funciones de ofertas y demandas también pueden ser de otros tipos, como por ejemplo, las que vamos a ver en los próximos temas.
Si quieres saber más sobre la ley de la oferta y la demanda, puedes visitar los siguientes enlaces, los dos primeros con un lenguaje más coloquial y el tercero un poco más técnico. El segundo enlace hace una crítica sobre la verdacidad de este sistema. Juzga tú mismo.