Economía Internacional: El comercio internacional

Imagen 1. Autor: Olaf Tausch.
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Para que exista la actividad económica es necesario el intercambio. En unidades anteriores hemos aprendido que el desarrollo económico tiene mucho que ver con la especialización. Si cada uno hacemos el trabajo para el que estamos especialmente dotados, la capacidad de producir bienes y servicios se incrementa.

Este argumento puede utilizarse cuando nos referimos a individuos, pero también cuando hablamos de regiones y naciones: la especialización permitirá alcanzar mayores niveles de producción.

Con todo, es verdad que pese a estas ventajas aparentes el comercio internacional se ha visto limitado por varios factores. Seguro que podemos pensar, al menos, en estos dos:

  • Los gastos de transporte de los productos importados son muy superiores a los de los productos nacionales, de modo que los primeros se encuentran en desventaja frente a los segundos.
  • La falta de información también limita el comercio internacional. Un mercado extranjero siempre va a presentar más riesgos al empresario dispuesto a comercializar un determinado producto: son más difíciles de detectar los gustos y preferencias de los consumidores, el funcionamiento interno del mercado, las normas que rodean las transacciones, etcétera.

Hoy en día los obstáculos mencionados (costes de distribución e información deficiente) se han reducido enormemente. Los principales motivos de dicha reducción han sido:

  • El avance de la tecnología ha permitido un extraordinario descenso en los costes de distribución. Los medios de transporte son más baratos y el almacenamiento de los productos se realiza en mejores condiciones. ¿Cómo explicar, si no, que un kiwi de Nueva Zelanda, un bien perecedero y de reducido precio unitario, que recorre el planeta de punta a punta, pueda ser disfrutado como postre en nuestra mesa, gozando de una más que aceptable relación calidad-precio?
  • También ha tenido lugar un extraordinario desarrollo de la Tecnología de la Información. Los medios de comunicación actuales facilitan que conozcamos los mercados internacionales. Ello tiene por consecuencia la convergencia de gustos, preferencias, normas y costumbres.

 



Imagen 2. Autor: Nino Verde.

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El comercio internacional es fuente de riqueza, pues permite optimizar los recursos de que disponen los distintos países, de forma que se empleen de la forma más eficiente en beneficio de todos. Durante las últimas décadas la humanidad ha vivido un nivel de progreso y desarrollo sin precedentes. El comercio internacional ha sido a la vez causa y efecto de todos estos procesos.

Sin embargo, no todo son aspectos positivos. Una situación de desequilibrio puede representar el lucro de unas naciones en detrimento de otras. Probablemente los desequilibrios comerciales sean un factor que ha abonado la crisis financiera mundial de 2008. En la historia abundan los ejemplos de explotación de unos países por otros, de expolio de sus recursos naturales y de apoyo a unas oligarquías que mantienen a determinadas naciones en la pobreza, la ignorancia y el atraso.

 

 

 

 

 


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El texto apunta dos factores como fundamentales para explicar el extraordinario incremento de las relaciones comerciales entre naciones en la actualidad, ¿de qué factores hablamos?