Ilustración del libro De claris mulieribus Imagen en Wikimedia Commons bajo dominio público

María va sabiendo que Boccaccio constituye, junto a Dante y Petrarca, el trío de autores humanistas que anuncian las novedades del Renacimiento. De ahí su trascendencia en la cultura europea y también en la literatura española, como veremos.

Su obra es tan grande y variada, que María necesita un pequeño esquema. Tradicionalmente, el estudio de su obra divide su producción de este modo:

En su obra juvenil en italiano Boccacio toca la lírica, la prosa y el poema narrativo. Incluso llega a experimentar con la mezcla entre prosa y verso. La misma variedad aplica a los temas: el amor, la mitología, el erotismo, lo pastoril...

La caza de Diana es un breve poema erótico en tercetos, que mezcla personales mitológicos (Diana, Júpiter) con reales (damas napolitanas y el propio Boccacio), con el fin de alabar la belleza y el poder redentor del amor, tema constante en su obra.

Como poema narrativo destaca El Filostrato (traducido del griego, significaría "abatido por el amor"), escrito en octavas reales y con argumento mitológico-amoroso. Se ha entendido como una narración de sus conflictos amorosos reales con Fiammetta. También narrativo es La Teseida, en octavas reales y sonetos, que pasa por ser el primer poema épico en italiano. Basado en La Eneida de Virgilio, incluye también referencias a su propia situación amorosa.

La Amorosa visión es un poema alegórico en tercetos compuesto en su etapa florentina. Es un alarde de cultura en que se alude a multitud de personajes reales, mitológicos y bíblicos. Recuerda en parte a La Divina Comedia de Dante.

Ninfale fiolesano es una fábula en verso, de ambiente pastoril, creada para explicar el nombre de los ríos toscanos. La presencia de pastores, ninfas y seres mitlógicos la convierte en una influencia clara para obras pastoriles de siglos posteriores.

En cuanto a sus composiciones en prosa de la época juvenil, estacan El Filococo, la Comedia de las ninfas florentinas y, especialmente, la Elegía de Madonna Fiammetta. La primera es una larga y complicada novela amorosa que narra las desventuras y peripecias de dos jóvenes enamorados, incluyendo una descripción de su propio enamoramiento de Fiammetta. Constituye un modelo de lo que luego se denominó en Europa "novela bizantina". La Comedia es una fábula de tema amoroso, donde Boccaccio mezcla verso y prosa, lo que constituye una novedad más tarde imitada. De nuevo, el poder redentor del amor es el tema principal. En cuanto a la Elegía, calificada a menudo como "novela psicológica", es una larga carta en que Fiammetta narra su amor por el joven napolitano Pánfilo. Presenta, por tanto, aspectos autobiográficos.

Interpretación pictórica de Fiammeta Autor: Dante Gabriel Rossetti. Imagen en Wikimedia Commons bajo dominio público

Sus obras de madurez más conocidas son El Decamerón y El Corbacho. Estudiaremos la primera en un apartado específico de este tema. En cuanto a la segunda, es una obra de carácter moral, satírico y misógino (crítica a las mujeres), probablemente debido a la influencia del monje del que hemos hablado en su biografía, reflejada en aspectos desagradables y oscuros.

Como ya hemos comentado, la influencia de Boccacio en la cultura literaria europea posterior fue decisiva. Refiriéndonos a la literatura española, cabe asegurar que su obra fue modelo de la novela sentimental del siglo XV en España, llegando incluso a La Celestina de Fernando de Rojas. En la primera mitad del XV el Arcipreste de Talavera, influido por el tono antifeminista de El Corbacho, publicó una obra con el mismo título y tema similar, aunque con un lenguaje más popular.

La novela pastoril, de gran auge en Europa y en España (La Diana, La Galatea de Cervantes, La Arcadia de Lope...), arranca de la Comedia y del Ninfale de Bocaccio, antes citados.

Pero, sin duda, su obra más influyente fue El Decamerón, publicada en castellano ya en 1496 en Sevilla. En el siglo XVI, El Patrañuelo, de Juan de Timoneda, bebe claramente en muchos de sus relatos. Las Novelas ejemplares de Cervantes le deben mucho en género,ambientación y temas, así como algunos relatos de Lope de Vega.

Su obra va abandonando ya abiertamente el teocentrismo medieval para ocuparse de las pasiones y sentimientos humanos, lo que preanuncia el humanismo renacentista.