1. Tipos de palabras. Palabras variables

Elaboración propia

Iniciamos, pues, el estudio de la Gramática; y lo hacemos con el propósito, no sólo de que conozcas los tipos y funciones de las palabras, sino también para que este conocimiento te ayude a mejorar tu expresión escrita. Antiguamente, como sabes, no todo el mundo tenía acceso a unos estudios. En estos casos, se hacía alusión al término de Gramática parda para referirse a aquellas personas sin formación académica que poseen un cierto tipo de sabiduría natural, pero a los que se consideraba bastos, rudos, ordinarios e ignorantes. Afortunadamente, esta situación ha cambiado y tú puedes conocer aquí la verdadera Gramática.

¿Para qué es necesario distinguir cada tipo de palabra? Necesitamos poder realizar con soltura un análisis morfológico para poder abordar, posteriormente, el análisis sintáctico de la oración. Por esta razón, queremos que pongas todo tu interés en conocer los rasgos que nos permiten diferenciar unas palabras de otras.

Para hablar sobre los elementos que constituyen la realidad, empleamos el sustantivo. Sin embargo, la comunicación resultaría extremadamente pobre si sólo pudiéramos nombrar a los seres sin precisar ninguna otra información sobre ellos. La realidad puede tener diferentes colores, tamaños, formas...; es decir, puede presentarse con múltiples cualidades. Un animal puede ser salvaje o doméstico; una novela, aburrida o entretenida. En definitiva, necesitamos hacer uso del adjetivo.

Además, los seres que forman parte de esa realidad actúan, se relacionan entre sí, tienen rasgos que los identifican y, por lo tanto, son, piensan, escuchan, corren, estudian, trabajan... El verbo es el encargado de expresar estas acciones.

Tú hablas mientras yo te escucho; nosotros nos comunicamos porque todos queremos formar parte de una comunidad: ellos, vosotros, alguien... Los pronombres nos facilitan el intercambio de información, puesto que nos permiten expresar posesión, cantidad, relación de proximidad o lejanía, etcétera, sin necesidad de repetir incansablemente el nombre al que sustituyen.

Del mismo modo que la actividad social empieza, generalmente, con la presentación del individuo, también las palabras necesitan presentarse. Y lo hacen mediante el uso de los determinantes (artículos, demostrativos, indefinidos, numerales...).

George va a completar sus estudios de gramática. ¿Lo acompañas?