Imágenes bajo licencia Creative Commons. Intestino grueso, fuente: Proyecto Biosfera (ITE). Sistema digestivo, autora: Lourdes Luengo

La egestión consiste en la eliminación de las sustancias no digeridas.

La parte final del intestino (intestino grueso) está especializado en la egestión. No obstante, en él también se produce procesos de absorción: agua, sales minerales y vitaminas producidas por la flora intestinal. En este tramo intestinal, la pasta semilíquida que circula por el tubo digestivo se transforma en las heces fecales al reducirse su contenido de agua y al sufrir fermentaciones que producen gases intestinales que le dan su olor característico.

Tras formarse las heces, éstas deben ser expulsadas del organismo. La expulsión se produce por dos mecanismos:

* Defecación. Es la expulsión de heces compactas que se eliminan a través del ano y que contienen poca cantidad de agua.

* Deyección. Es la expulsión de heces líquidas, producidas en el intestino grueso, a través de la cloaca. Un ejemplo son las deyecciones de las aves.