2.3. Absorción
Imágenes bajo licencia Creative Commons. Fondo, fuente: Flickr. Animación de Lourdes Luengo |
Para que la absorción sea más eficaz la superficie encargada del proceso se incrementa. Para ello los vertebrados aumentan la longitud del intestino y repliegan fuertemente su superficie (vellosidades intestinales).
En general, el intestino de los vertebrados posee dos regiones diferentes:
* Intestino delgado, que termina la digestión y realiza la absorción de los nutrientes.
* Intestino grueso, que prepara el contenido que no ha sido absorbido para su egestión.
Las paredes del intestino delgado se encuentran muy replegadas con objeto de aumentar la superficie de absorción, es lo que se conoce como vellosidades intestinales. A su vez, las células absorbentes de estas vellosidades presentan unas prolongaciones microscópicas de su membrana que todavía aumentan más la superficie de contacto, las microvellosidades intestinales.
En el duodeno del intestino delgado (zona en contacto con el estómago) se produce la digestión total de los alimentos. El quimo (masa pastosa que sale del estómago) es transformado en quilo. Este proceso es llevado a cabo por: Para que todas las enzimas puedan actuar en el intestino, es necesario neutralizar el quimo con bicarbonato sódico. Tras la neutralización actúan los diferentes jugos que forman una papilla formada por nutrientes agua, sales y vitaminas. |
La superficie del intestino humano gracias a las vellosidades y a las microvellosidades intestinales abarca aproximadamente 300m2, que se corresponde con una pista de tenis.