4. Ciclo de Wilson

Sirve para ilustrar ciclos orogénicos de formación de cordilleras. En él se suceden las distintas estructuras que hemos visto a escala cortical (rift continental, dorsal, orógeno perioceánico e intercontinental) a modo de ciclo.

Imágenes bajo licencia Creative Commons. Isla de las Ciencias, autor: Manuel Merlo Fernández 

 

Básicamente el ciclo comienza en un antiguo continente que sufre una rotura con formación de un rift continental (1).

Cada segmento de ese continente se transforma en una nueva placa independiente que crece mediante la incorporación de nueva litosfera con formación de una dorsal (2).

Al separarse las dos placas aparece y crece un nuevo océano (fase oceánica) (3).

A cierta distancia de la dorsal puede romperse la unión de la nueva litosfera oceánica y originarse una zona de subducción (con formación de un orógeno perioceánico). A partir de este momento se irá consumiendo corteza y reduciendo el océano (4)(5).

Finalmente el océano puede desaparecer colisionando las dos masas que al principio del ciclo formaban una unidad (colisión con formación de orógeno intercontinental) (6).

 

Situaciones tectónicas relacionadas con el ciclo de Wilson.

Imagen bajo licencia Creative Commons (Wikimedia Commons), autor: Hannes Grobe

Icono IDevice Para saber más

Esta animación resume los procesos comprendidos en el ciclo de Wilson para describir la formación de los continentes:

 

 


Icono IDevice Actividad de Lectura
Lee el siguiente texto, extraído de RENA. Tectónica terrestre:

EL CICLO DE WILSON

“Se considera que a lo largo de la historia de la Tierra este ciclo se ha completado en cinco ocasiones, precedido por una tectónica de miniplacas, hace entre 2.800 y 2.500 millones de años. Esta es la época en la que se formaron las grandes extensiones de granitos.
Los supercontinentes se disgregarán y se unirán en varias ocasiones:
Hace 2.100 millones de años (Pangea I),
Entre 1.800-1.600 millones de años (Pangea II),
Hace 1.100 millones de años (Pangea III).
Y hace 600 millones de años se formó Pangea IV que sufrió un ciclo de Wilson completo hasta formar, hace 250 millones de años Pangea V que comenzaría el ciclo actual.
Pangea V se corresponde con el Pangea que imaginó Wegener.

Según esto los supercontinentes se forman cada 400 a 500 millones de años, y un punto caliente es capaz de romper un continente en 100 millones de años.

Algunos autores piensan que este ciclo es un modelo más que una realidad, y que los grandes supercontinentes no están unidos al mismo tiempo nunca, sino que se agregan y se disgregan partes en diferentes momentos de la historia de la Tierra , más o menos próximas. Esto es debido a que los puntos calientes se pueden producir bajo la corteza oceánica, y no necesariamente bajo los continentes más grandes, ni en su centro, que es donde menos cambios de temperatura se producen. En la actualidad los puntos calientes más activos están en las islas Canarias, Cabo Verde y en el parque de Yelowstone entre otros.

Es muy probable que, mientras en algún lugar esté ocurriendo disgregación, en otra ocurre agregación, e incluso mientras está chocando una placa contra otra, en el interior de una de esas placas se está formando un nuevo rift que rompa y separe otras placas.
Esto es lo que parece estar ocurriendo en la actualidad en la placa africana que se separa a lo largo de la dorsal del Índico empujando hacia el continente africano pero también se separa a lo largo del valle del Rift, empujando el continente africano hacia el Índico.
Aunque el ciclo de Wilson otorga una importancia excesiva a los continentes, es un modelo que debe ser considerado con interés.

El principal problema que no resuelve la teoría es, cómo se producen las corrientes convectivas, cuáles son las irregularidades en el manto, o en el núcleo, qué permite que en un determinado punto la temperatura sea mayor (o menor) que en su entorno.”